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Ventanas para personas con movilidad reducida

interiores para personas con movilidad reducida

Las personas con discapacidad requieren ventanas especiales que les permitan acceder y salir de su casa con facilidad. Las ventanas de pvc son una excelente opción para personas en sillas de ruedas, ya que son fáciles de abrir y cerrar. Además, las ventanas de pvc ofrecen una gran seguridad y protección. Sigue leyendo para conocer todos los detalles de las soluciones de PVC disponibles en el mercado que facilitan la vida de las personas con movilidad reducida.

 

Vivienda adaptada a las necesidades de una persona en silla de ruedas

 

La vivienda de una persona en silla de ruedas debe estar adaptada a sus necesidades específicas. Entre otras cosas, se debe tener en cuenta la altura de las puertas y ventanas, el ancho de los pasillos y el número de escaleras. Las personas en silla de ruedas requieren ventanas especiales para poder acceder a su hogar con facilidad.

 

Las ventanas de PVC son una excelente opción para las personas con movilidad reducida, ya que son muy fáciles de abrir y cerrar. Además, existe la posibilidad de adaptar las ventanas pvc a las necesidades de las personas con discapacidad. En Veneo realizamos ventanas a medida con la manilla rebajada a la altura que indique el cliente.

 

Elementos más importantes a la hora de adaptar la casa a las necesidades de las personas con movilidad reducida

 

Además de rebajar las manillas de las ventanas, existen otros elementos que se deben tener en cuenta a la hora de adaptar un hogar para personas con movilidad reducida. Entre ellos, podemos mencionar:

 

ALTURA DE MONTAJE

 

Los usuarios de sillas de ruedas, ya sean musculares o eléctricas, tienen una perspectiva completamente diferente. Sentados a una media de unos 50 centímetros del nivel del suelo, ven lo mismo de forma diferente y pueden llegar mucho más abajo que las personas que están de pie.

 

Teniendo en cuenta estas limitaciones, según el concepto de diseño universal, las ventanas deben colocarse a un nivel tal que las personas con discapacidad puedan manejarlas de forma independiente y observar el paisaje que hay fuera de la ventana. Entonces, ¿cuál es la altura óptima de instalación? El borde inferior de la ventana no debe estar más de 85 centímetros por encima del nivel del suelo.

 

ALFÉIZAR ADECUADO

 

Instalar una ventana a la altura adecuada no es suficiente para que una persona con problemas de movilidad pueda utilizarla de forma cómoda y, sobre todo, independiente. Al adaptar un edificio a las necesidades de una persona con discapacidad motora, los alféizares de las ventanas también deben estar bien colocados. Al igual que el borde inferior de la ventana, deben estar a una altura máxima de 85 cm del suelo.

 

La anchura de los alféizares de las ventanas también es crucial, ya que no deben sobresalir más de 5 cm del plano de la pared. ¿Por qué? Un alféizar de ventana más ancho puede bloquear o restringir significativamente el rango de movimiento de alguien que intente alcanzar la manilla desde una posición sentada.

 

LO MÁS IMPORTANTE… ¡LA MANILLA!

 

Incluso una ventana baja puede ser una barrera insuperable para una persona en silla de ruedas. Recuerda instalar los sistemas con la manilla situada a una altura de 85-120 cm del suelo. La solución óptima es elegir una carpintería de ventana con herrajes que permitan montar la manilla en la parte inferior y horizontal del marco.

 

Además, la manilla debe tener un color que contraste con el marco de la ventana y tener un diseño que permita abrirla con una sola mano. Esto es posible con manillas de ventana especialmente alargadas en forma de palanca, que son más fáciles de manejar que las manillas de pomo o las manillas de ventana estándar.

 

MODO DE APERTURA

 

Una de las consideraciones más importantes a la hora de seleccionar e instalar ventanas en un espacio que será utilizado por una persona discapacitada es la forma de abrirlas. ¿Cuál de las soluciones disponibles en el mercado funcionará mejor para los usuarios de sillas de ruedas? Para ellos se recomiendan los modelos abatibles, correderos y oscilantes.

 

Las ventanas oscilobatientes son la opción más común, pero deben adaptarse según las reglas descritas anteriormente (manilla, umbral, altura de instalación). Pueden tener un tipo especial de herraje que no sólo permite montar la manilla en la barra horizontal inferior del marco de la ventana, sino que también facilita su uso.

 

Al girar la manilla, no es necesario tirar de la hoja de la ventana hacia uno mismo, ya que se desliza automáticamente hacia el interior de la habitación. Para las personas tumbadas o con problemas para levantar los brazos, se recomienda utilizar un sistema de control automático de las ventanas mediante un mando a distancia o una aplicación móvil como parte de un sistema doméstico inteligente.

 

SIN UMBRAL, SIN BARRERAS

 

En una casa unifamiliar o un piso situado en la planta baja, también merece la pena instalar puertas de patio adecuadas para usuarios de sillas de ruedas y personas con dificultades para caminar. Gracias a la instalación de una manilla exterior con llave, los usuarios pueden disponer de una entrada adicional a la casa sin necesidad de construir un camino de acceso adicional. La mejor opción para adaptar una casa o un piso a las necesidades de las personas con discapacidad son las ventanas correderas elevables HS (por ejemplo, la Veneo Elevadora HS).

 

En una casa unifamiliar o un piso situado en la planta baja, también merece la pena instalar puertas de patio adecuadas para usuarios de sillas de ruedas y personas con dificultades para caminar. Gracias a la instalación de una manilla exterior con llave, los usuarios pueden disponer de una entrada adicional a la casa sin necesidad de construir un camino de acceso adicional. La mejor opción para adaptar una casa o un piso a las necesidades de las personas con discapacidad son las ventanas correderas elevables HS (por ejemplo, la Veneo Elevadora HS).

 

No sólo permiten crear un espacio de paso amplio, sino que también tienen un umbral más bajo, lo que permite cruzarlo fácilmente con una silla de ruedas o cuando resulta difícil levantar las piernas. Este tipo de puertas se abren casi sin fuerza, pero también pueden ser motorizadas adicionalmente y pueden ser controladas a distancia mediante un mando o una app móvil.

 

Mejorar la calidad de vida de las personas con limitaciones físicas

 

Es, sin duda, una tarea que requiere la consideración de muchos factores. Desde el diseño urbano y la señalización, pasando por los espacios interiores, las personas con discapacidad deben poder moverse libremente en todos los entornos. Y eso incluye también el hogar. En una casa o un piso, las personas con discapacidad necesitan espacios libres de obstáculos y suficientemente amplios para maniobrar con la silla de ruedas. Y es aquí donde entran en juego las ventanas y puertas adecuadas.

 

Al seleccionar e instalar ventanas y puertas, deben tenerse en cuenta muchos factores, como el tipo de marco, el tamaño de la hoja, el sistema de apertura, el diseño del umbral o incluso el tipo de cerradura.

 

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